Carl Sagan: La primera gran virtud del hombre fue la la duda, y el primer gran defecto la fe.
domingo, 2 de octubre de 2016
“Dios no aparece en ninguna parte en el universo descrito por la ciencia”
El divulgador científico francés Christophe Galfard, en Madrid. Carlos Rosillo
Afirmaba el nobel Richard Feynman que la física es a las matemáticas lo que el sexo es a la masturbación. Christophe Galfard,
nacido en París en 1976, bromea y dice que primero se dedicó a la
masturbación y después al sexo. Al sexo duro. Formado como matemático,
se doctoró en física en la Universidad de Cambridge, bajo la tutela de
Stephen Hawking. Durante siete años investigó con el científico más
famoso del mundo los agujeros negros y el origen del universo, generando
“más nuevas preguntas que respuestas”. Pero
aquella aventura intelectual acabó en 2006. Ahora, abandonada la vida
académica, Galfard se ha convertido en uno de los divulgadores
científicos más exitosos del mundo. Su último libro, El universo en tu mano
(Blackie Books), lleva 100.000 ejemplares vendidos en Francia. El
volumen es, según él mismo ofreció a su editora, “un libro fácil de leer
de ciencia divulgativa sobre todo lo que sabemos del universo desde
antes del Big Bang hasta hoy”.
Galfard consigue su titánico objetivo en poco más de 400
páginas, llevando al lector de la mano por un universo infinito del que
la mayor parte de la población solo puede ver 200 estrellas en una noche
clara. Su editorial española ha colocado una faja en su libro que
sostiene que Galfard es “el discípulo más brillante de Stephen Hawking”.
“Es mentira, no lo soy, los hay mucho más brillantes que yo”, reconoce
entre risas.
"La humanidad no es consciente de su lugar en el universo"
Pregunta. La Agencia Espacial Europea acaba de publicar el mapa más completo de nuestra galaxia,
la Vía Láctea, con 1.000 millones de estrellas. Pero la galaxia en
realidad tiene 300.000 millones de estrellas como nuestro Sol, con
innumerables planetas. Y hay unos 400.000 millones de galaxias visibles.
Sin embargo, solo en nuestro planeta hay más de 4.000 religiones
diferentes y la gente se mata por ellas. ¿Cree que la humanidad es
consciente de su lugar en el universo? Respuesta. No es consciente, en absoluto.
Es una de las razones por las que he escrito este libro: ofrecer
información sobre el universo extraordinario que habitamos y sobre el
potencial que representa para nosotros. Solo ahora empezamos a
descubrirlo, a acceder a ciertos lugares, a ciertas ideas, a cierta
filosofía del conocimiento. Somos la única especie terrestre capaz de
descubrir estas cosas. Las hormigas son geniales, pero no lo han
conseguido.
Christophe Galfard y Stephen Hawking, en la Universidad de Cambridge.
P. Napoleón, según la tradición, le señaló
al astrónomo Pierre-Simon de Laplace que no había mencionado ni una sola
vez a Dios en su obra Exposición del sistema del mundo (1796).
Y Laplace le respondió: “Nunca he necesitado esa hipótesis”. Usted
tampoco menciona a ningún dios. ¿Tampoco necesita esa hipótesis? R. No, pero el objetivo de la ciencia no es
encontrar razones que sostengan que dios existe o lo contrario, sino
descubrir cómo funciona la naturaleza. No tiene nada que ver. Para
algunos, la religión puede ser una fuente de inspiración. Para otros es
un bloqueo absoluto. Depende de la gente y eso es independiente de la
investigación científica. Si aceptamos respuestas, no es ciencia. Si
aceptamos preguntas, entramos en una metodología científica. De momento,
solo la metodología científica nos ha permitido descubrir cosas que no
conocíamos antes. Ese choque entre ciencia y religión me da igual. En mi
departamento de Cambridge había colegas de muchas religiones, como
cristianos, musulmanes e hindúes, pero intentábamos descubrir las mismas
cosas. La religión no era un obstáculo. Si metes a Dios en la ecuación,
entonces ya no es ciencia. Dios no aparece en ninguna parte en el
universo descrito por la ciencia.
"Si metes a Dios en la ecuación, entonces ya no es ciencia"
P. El nobel Richard Feynman también dijo
que "la física es como el sexo: seguro que da alguna compensación
práctica, pero no es por eso por lo que la hacemos". ¿Está de acuerdo? R. Totalmente. Las aplicaciones prácticas
no forman parte de la ecuación en la ciencia teórica. Y no pasa nada. En
general, las personas que descubren algo nuevo no son las que descubren
sus aplicaciones prácticas. Llegan más tarde, cuando comprendemos el
fenómeno. En el momento del descubrimiento, la aplicación tecnológica no
existe. Toda la física cuántica, cuando fue descubierta hace un siglo,
no tenía aplicaciones prácticas, más allá de entender nuestro mundo. Hoy
en día no hay nada que no utilice la mecánica cuántica: ordenadores,
teléfonos móviles, televisores… No hay que pensar en aplicaciones
prácticas cuando se hace física teórica, porque no funciona así. P. Usted confía mucho en la ciencia. En su
libro sugiere que en el futuro podremos viajar por el universo a través
de los llamados agujeros de gusano, atajos en el espacio-tiempo
descritos en la teoría de la relatividad general de Albert Einstein. R. Quién sabe. Puede ser, no lo sabemos. De
la teoría de la relatividad general, que tiene un siglo como la
mecánica cuántica, no tenemos casi aplicaciones. Tenemos el GPS y poco
más. Quizá la teoría se descubrió demasiado pronto y todavía no hemos
entendido cómo utilizarla. Pero estoy convencido de que llegarán las
aplicaciones y de que algunas de ellas hoy no podemos ni imaginarlas. P. El gran descubrimiento de los últimos tiempos es la confirmación de la existencia de las ondas gravitacionales
descritas por Einstein, producidas por los cuerpos más violentos del
cosmos y que deforman el espacio y el tiempo a su paso. Usted dice que
es un nuevo ojo para ver el universo.
"Pueden existir formas de vida diferentes que todavía no hemos encontrado"
R. Sí, desde la aparición de la humanidad
hasta hoy, todo lo que hemos sabido del universo ha sido a través de la
luz. Ahora, por fin, tenemos otra cosa. De momento solo hemos abierto un
poquito ese ojo y nos ha permitido detectar colisiones de agujeros
negros. Veremos más cosas, espero. Y no sabemos qué serán. P. Al final del libro, introduce esta
reflexión: “Puede que te preguntes qué es lo que no nos esperamos. Si te
digo la verdad, yo también. ¿Encontraremos pruebas de dimensiones
adicionales? ¿Encontraremos algo en lo que nunca hemos pensado?”. ¿Qué
espera usted? ¿Puede haber otras formas de vida diferentes? R. Pueden existir formas de vida diferentes
que todavía no hemos encontrado. Sería una revolución en la biología.
Todavía no hemos encontrado nada vivo en la Tierra que funcione de
manera diferente al resto. Conocemos una manera de hacer funcionar la
vida, que es la que tenemos en la Tierra. ¿Hay otras maneras en el
universo? Yo creo que sí, pero no sé a qué se parecerían ni cómo
estarían fabricadas. Ni siquiera hemos conseguido crear la vida tal y
como la conocemos. Estamos muy lejos de crear otra diferente. P. El millonario ruso Yuri Milner patrocina un proyecto de 100 millones de dólares para buscar vida inteligente, la iniciativa Breakthrough, en la que participa Stephen Hawking. ¿Qué opina?
"Los políticos dicen tantos disparates... La verdad no es muy importante para ellos"
R. Me encanta. Es una iniciativa que busca
vida inteligente que emita señales. Dependemos de la suerte. A lo mejor
el universo está plagado de vida inteligente y no lo vemos. Como dice
Hawking, primero habrá que encontrar vida inteligente en la Tierra. P. Hay una brecha entre la ciencia y el
público general. La gente vota sobre alimentos transgénicos, energía
nuclear y muchísimos temas científicos sin el conocimiento necesario.
¿Cree que este divorcio afecta a la democracia? R. Completamente. Por eso he escrito este
tipo de libro: para que la gente pueda tener una opinión propia. Sin
conocimiento científico, la democracia es más complicada. Los políticos
dicen tantos disparates... La verdad no es muy importante para ellos, en
general. En la investigación científica, en su conjunto, hay una
honestidad. Los individuos siempre pueden decir tonterías, pero se puede
confiar en el conjunto de la comunidad científica, porque hay un
sistema de verificación. Hay una verdad actual, que puede evolucionar,
pero que está ahí. Es agradable saber que hay una parte de la población
mundial que sirve a la humanidad y no está ahí por el poder, sino por la
alegría del descubrimiento. P. Donald Trump ha dicho que el cambio climático es un invento de los chinos. Y parece que la mitad de EE UU le va a votar. R. Sí, porque se lo creen, aunque no sea
verdad. Esto no debería ser posible. La gente debería tener un mínimo
conocimiento científico. Y no es su culpa, sino de las instituciones,
que deberían mantener el contacto con el gran público. En Francia,
Nicolas Sarkozy ha dicho hace dos semanas que el cambio climático ha
existido desde siempre, lo que quiere decir que lo que ocurre ahora no
es culpa de los humanos. No es responsable decir eso. No es verdad.
Siempre ha habido variaciones climáticas, pero conocemos bien el origen
del cambio climático actual: es humano. P. El empresario estadounidense Elon Musk acaba de desvelar un plan para crear “una civilización autosuficiente” en Marte, con un millón de personas a lo largo de este siglo. ¿Es un brindis al sol? R. Hoy no tenemos la tecnología, pero
necesitamos locos como Elon Musk para acelerar este tipo de cosas. Él
tiene los científicos, la potencia financiera y la locura para
intentarlo. A mí me parece genial. P. ¿Usted se ofrece como voluntario para ir a vivir a Marte? R. No, pero hay muchísimos. Fuente: www.elpais.es
No hay comentarios:
Publicar un comentario